ES APROPIADO CITAR LA FRASE DEL FILOSOFO ITALIANO SÉNECA: “NUNCA HAY VIENTO FAVORABLE PARA EL QUE NO SABE HACIA DONDE VA”.
Hay empresas que pierden su horizonte por ciertos motivos, ya sean económicos, financieros, de mercado u organizacional. Por lo que aconsejo hacer un diagnóstico de la situación actual con miras a analizar y evaluar los aspectos internos y externos que afecten a la empresa o puedan llegar a hacerlo. El mismo debe hacerse en profundidad y evaluando muy bien la gravedad de la situación.
Es preciso identificar las causas que provocan la distorsión en los procesos dentro de la gestión de la empresa, a los fines de lograr una eficacia operativa esencial para un rendimiento superior, siendo ésta la meta principal de todo negocio. En analogía con el posicionamiento estratégico, implica realizar actividades diferentes con respecto a la competencia o bien, actividades similares de manera diferente con metas a largo plazo, diez años o más. Con dicho posicionamiento se definen los objetivos anuales para alcanzarlas, debiendo ser claros, razonables, consistentes y mensurables, alcanzables por medio de políticas que se definan como directrices, reglas y procedimientos que se formulan en términos de actividades de finanzas, contabilidad, administración, marketing, entre otras.
Con todo lo esgrimido, es fundamental apostar a ser competitivos en el mercado que actuamos. Recomiendo estudiar la cadena de valor de la empresa, analizando los costos y tiempos insumidos en cada actividad o proceso, como los de proveedores, producción, distribución, ventas y marketing, servicios al cliente y administrativos. Este análisis va a arrojar si existen ventajas operativas, favoreciendo la competitividad con respecto a los rivales, volviéndose más eficientes en costos operativos, calidad de ejecución y tiempo de respuestas.
CUCHER, Osvaldo Adrian
Contador Público Nacional
Mat. 10-11119-2